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El contenido multimedia se ha hecho muy popular y se ha convertido en una estrategia clave para las empresas que se quieren dar a conocer. De hecho, una de las frases que se ha vuelto popular en el marketing actual es “el contenido es el rey”. Esto nos da una idea de cómo se está moviendo la industria y hacia dónde están apuntando las nuevas empresas.
Según se ha ido haciendo más popular, las empresas se toman con más seriedad el hecho de crear contenido y necesitan diseñar estrategias para lograr que sea efectivo. En este artículo, hablaremos sobre las estrategias de contenidos.
El concepto puede definirse de distintas formas. Puedes consultar la definición de marketing de contenidos en Wikipedia o en algún otro sitio especializado en marketing.
Una estrategia de contenidos consiste en la planificación, gestión y desarrollo del contenido que va a ser presentado para promocionar algún producto. El contenido puede ser de cualquier forma (visual, textual o auditivo) y establece los lineamientos a seguir en el desarrollo del contenido.
El concepto cobra aún más importancia cuando se habla de estrategia de marketing de contenido, donde el objetivo es crear contenido que logre generar interés en los potenciales compradores y convertirlos en clientes. Es en este ámbito donde el contenido adquiere mayor relevancia, ya que es el instrumento para llegar al cliente y adquirirlo (lograr que compre el producto).
Las estrategias de contenidos también tienen gran importancia cuando se habla del posicionamiento de páginas web usando herramientas SEO. En la estrategia de contenidos, se establecerán los lineamientos que debe seguir cada texto a ser realizado, las palabras claves que se deben usar y su estructura. Para poder hacer esto, se requieren redactores especializados en SEO, los cuales pueden encontrarse fácilmente en sitios web como Scribeur.
La idea de contar con una estrategia de contenidos puede sonar muy atractiva. Sin embargo, implementarla puede ser un problema. No existe una receta única para lograrlo, pero se pueden indicar algunos consejos o puntos a tratar al momento de hacerlo.
Inicialmente, es importante plantear los objetivos que se quieren alcanzar con la estrategia, con esto se podrá saber si estamos avanzando por el camino correcto o no. Para plantear los objetivos se puede usar el método SMART: S (Specific o especifico), M (Measurable o medible), A (Achievable o alcanzable), R (Realistic o realista) y T (Time-Bound o limitado en tiempo).
En segundo lugar, se deben establecer las metas. Nótese la diferencia entre meta y objetivo, siendo la meta algo cuantificable y específico, mientras que el objetivo puede ser más genérico. Seguidamente, es interesante conocer la audiencia a la que se quiere llegar con el contenido (sexo, edad, aspectos que puedan interesarle y más), con el fin de poder diseñar un contenido que le parezca interesante y se sienta atraída por él, sin necesidad de obligarlos a prestar atención en el producto con estrategias intrusivas.
A continuación, se recomienda definir estrategias y el tipo de contenido, en este caso, los pasos a seguir para alcanzar los objetivos y la manera en la que se presentará el contenido (entrevistas, imágenes, ebooks y más). Además, no olvides definir los medios por los que se va a difundir el contenido. Estos deben seleccionarse teniendo en cuenta el público al que se quiere llegar, el tipo de contenido a presentar y la forma en la que se pretende llegar al usuario.
Aunque parezca obvio, es bueno definir un calendario editorial, donde se tendrá una estructura programada con los pasos a seguir, indicando las fechas y las formas en las que se publicará el contenido. A continuación, se deben establecer las métricas, es decir, la manera en la que van a ser medidos los resultados. Este paso es de gran importancia porque es lo que permitirá ver de manera objetiva si la estrategia de contenido está dando resultado o no.
Por último, no olvides medir los resultados, donde se podrá ver si la estrategia es efectiva o no. Con esta información, podrás tomar las medidas necesarias para corregir lo que pueda estar fallando, bien sea el contenido que se elabora o la manera en la que se distribuye.
En las estrategias de contenidos, está muy presente el texto como contenido y las técnicas SEO. Para ello, existen plataformas como Scribeur, que proveen apoyo para la parte más importante de la creación de las estrategias de contenidos.
En este sitio web, podrás encontrar redactores calificados en técnicas SEO que te ayudarán en la elaboración del contenido que deseas ofrecer para darte a conocer. Esto es de gran importancia ya que el portal online facilita el proceso de encontrar a personas con estas habilidades.
Cuentas con dos formas de gestionar el proyecto. La primera es de manera autónoma, donde tú mismo crearás el pedido, el redactor se encarga de elaborarlo y, una vez lo entregue, podrás pedir modificaciones en un periodo de hasta 5 días. Una vez que todo sea correcto, podrás retirar el artículo en el formato que sea más conveniente (Word, PDF o Excel). Esta modalidad es ideal para las personas que saben gestionar por su cuenta el proyecto en términos de las pautas a seguir en el SEO.
La segunda opción es la gestión personalizada del proyecto, donde el equipo de Scribeur es quien se encarga de gestionar el SEO del proyecto en función de lo que desee el cliente. En este caso, el cliente debe indicar el tema, las palabras clave que pueda tener en mente y más. Esta modalidad está diseñada para clientes que no conocen el proceso del SEO o para aquellos que son más exigentes y requieren tareas demandantes como la integración de contenido o un mayor volumen de trabajo.
En conclusión, la estrategia de contenidos es de gran importancia para poder llevar a cabo un proyecto de manera correcta y ordenada. Esta permite tener control sobre el proceso y saber cuáles son los aspectos que pueden mejorar. Además, puede ser aplicada a cualquier proyecto que comprenda la elaboración de contenido.