El marketing de contenidos es una de las estrategias en línea más populares y efectivas para las empresas. Cuando se trata de actualizar los blogs, todos recomiendan hacerlo regularmente y de manera consistente. Pero para la mayoría de nosotros, lo único regular o consistente sobre cómo blogueamos es que no existe ninguna planificación al respecto.
Tener un plan de contenido definido para tus blogs reducirá la sensación abrumadora de no saber qué publicar, y que es más común de los que muchos quieren admitir. Además, te ayudará a llegar a más clientes potenciales. Entonces, ¿qué estás esperando para crear el tuyo?
Existe una frase famosa, “Si fallas al planear, planeas fallar”, que es popular en el marketing y los negocios. Y es absolutamente cierta en la creación de contenidos, pues incluso la estrategia de contenido mejor pensada está condenada al fracaso sin un plan claro para ponerla en práctica.
Un plan de contenido es una técnica que te ayudará a establecer y programar la información que proporcionarás a tu público objetivo. Establecer un plan de contenido tiende a ser uno de los principales desafíos para los equipos de marketing de contenido.
De la misma manera que un director de proyectos crea un plan de proyecto con fechas de entrega e hitos, el plan de contenido adopta el mismo enfoque, pero se centra en el contenido como el entregable. Un plan de contenido describe quién, qué, cómo, dónde y cuándo se desarrolla el contenido.
Para garantizar el éxito de tu estrategia de marketing es importante planificar la creación y distribución del contenido antes de ponerla en marcha. Puedes seguir estos pasos para crear un plan de contenido para tu blog.
Esta parte consiste en analizar la situación de tu propia marca o empresa y comprender el estado del mercado actual. Una buena manera de ejecutar este diagnóstico es completar un análisis FODA.
Este es un método de planificación que evalúa las fortalezas, debilidades, oportunidades y amenazas de tu marca o la de tus competidores. Este análisis te ayudará a entender la situación del mercado en determinado momento.
En este diagnóstico también debes incluir qué es valioso para tu audiencia y quién es tu audiencia. Asimismo, puedes hacer un análisis de competencia para evaluar si los temas que vas a desarrollar cuentan con el potencial para dirigir tráfico a tu página.
Siempre es importante que reconsideres lo que realmente quieres lograr con tu plan de contenido. Mayor tráfico a la web, prestigio y reconocimiento, posicionamiento SEO, aumentar la suscripción o las conversiones, etc.
Una vez que tengas claro tu propósito, podrás dirigir el contenido hacia el logro de los objetivos. Un plan de contenido es inviable si no defines dónde quieres ir. ¡Fija tus objetivos!
Por lo general, toda inversión que quieras hacer pasará por el análisis de lo que obtienes a cambio. En la mayoría de los casos se trata de tráfico que luego podrás convertir en clientes. Para eso debes planificar el contenido, de tal forma que quien llega pueda ser un potencial cliente.
Recuerda para quién estás escribiendo o a quién va dirigida tu estrategia de contenido. Los pasos anteriores te dieron algunas ideas de lo que estás buscando lograr, ahora es el momento de detenerse y analizar.
¿Quién es tu cliente ideal, el que consume tu contenido o compra tus productos? ¿En qué tipo de información están interesados? ¿Qué redes sociales utilizan? ¿De qué están hablando? Cuanto mejor definas tu objetivo, comprador potencial o cliente ideal, más efectivo y exitoso será tu plan.
Al llegar a este punto, ya todos los elementos están listos para elaborar en forma práctica el plan. Para esto debes:
Todas estas decisiones darán forma a tu plan de contenido.
El contenido siempre es un buen paso para iniciar la conversación con los lectores. No temas consultarlos, dejarlos hablar y tomar nota de todos sus comentarios. Si estás comenzando desde cero, no te preocupes, tu estrategia puede cambiar de dirección dependiendo de si el plan te lleva a cumplir tus metas o no.
Si los comentarios o el recibimiento del contenido no son positivos, es buena idea volver a repasar los pasos anteriores para redefinir el plan.